jueves, 3 de marzo de 2022

Calendario de la Prueba de Acceso y Admisión a la Universidad (Año 2022)

 

El presente calendario es una versión del que la Universidad de Sevilla proporciona a los institutos y publica además en su página web. Nuestra ilustración no es (ni pretende ser) un documento oficial, bien que garantizamos la veracidad de los datos que en él aparecen.

Las fechas escogidas son las siguientes:

       Para la convocatoria ordinaria, el martes, el miércoles y el jueves de la tercera semana de junio (días 14, 15 y 16).  Esta es la ubicación tradicional de esta prueba. Recordemos que el jueves 16 se celebra en Sevilla y Granada la Solemnidad del Corpus Christi por lo que la jornada resulta festiva en estas urbes. No obstante, los estudiantes de estas ciudades que se presentan a selectividad (y los profesores que los vigilan) se verán obligados a examinarse en ese día, como el resto de sus compañeros andaluces

       Para la convocatoria extraordinaria, se escoge el mes julio por segunda vez y se da por hecho que esta ubicación es ya definitiva. Las fechas seleccionadas son el martes, el miércoles y el jueves de la tercera semana (días 12, 13 y 14).

El horario de exámenes experimenta un cambio respecto a la distribución del año 2021.  En concreto, Economía de la Empresa pasa de la primera hora del jueves a la última de ese día, medida que no creemos que aplauda ninguno de los bachilleres que se presentan a esta asignatura.

Más que pasar, Economía vuelve al último tramo, ubicación que mantenía allá por el 2012. Desde entonces ha ido cambiando de horario a lo largo del último día, sin que parezca que encuentre asidero.

Lamentablemente, un año más los alumnos de Humanidades deben examinarse el miércoles de latín a primera hora y de griego en el turno siguiente. Sería conveniente dejar al menos un tramo de intervalo, como sucedía en el año 2017.

Para la cabal compresión de este calendario / horario se hacen precisas tres advertencias:

       Se recuerda que el llamamiento de alumnos a los distintos exámenes será a la hora señalada como «de citación y distribución», (30 minutos antes del comienzo de la prueba). El llamamiento para el primer examen será a las a las 8:00, el segundo lo colocará a las 10:30 y el tercero a las 13:00 horas. Por tanto, el tiempo de descanso fijado en principio para 60 minutos, en la práctica no debe extenderse más allá de la media hora.

       Las franjas horarias de citación se mantienen en tanto en cuanto la universidad no fije otras que considere más oportunas. Incluso permite que cada sede pueda cambiarlas si existe una razón que lo justifique.

       El horario de las materias del tercer día por la tarde se reserva exclusivamente para los alumnos que tiene más de un examen el mismo día y a la misma hora (en el 2º o 3º día por la mañana), debiendo realizar en dicho horario y en primer lugar la prueba que aparece antes en el respectivo cuadro y realizará el examen de la otra materia en el tercer día por la tarde en el horario que se indicará oportunamente.

A partir de nuestra experiencia sobre las pruebas de la coincidencia horaria, podemos afirmar que cada Tribunal las organiza con amplia libertad, evidentemente con mirar al beneficio del heterogéneo alumnado que se presenta a ellas. En algunas sedes se establecen dos tramos de pruebas, bien que reduciendo el tiempo de descanso, y en otras se prefiere agrupar a todos los escolares que se presentan en el primer turno.

 Naturalmente, sea cual sea el horario escogido, éste es comunicado al alumno con la suficiente antelación.

Concluimos con la expresión de nuestra disconformidad con el emplazamiento de la evaluación extraordinaria a julio, ubicación vinculada a la decisión de adelantar la prueba de recuperación de segundo de bachiller de los primeros días de septiembre a la tercera semana de junio.

Ambos anticipos avanzan un paso más, probablemente el último y el definitivo, en conducir a la prueba extraordinaria a mero trámite administrativo, a la completa irrelevancia. Hemos conocido a alumnos que, con todo el verano por delante, han podido superar hasta cuatro asignaturas suspensas. Alguno incluso se presentó a la selectividad de septiembre, la superó y pudo entrar en el ciclo formativo que deseaba.

Obviamente, esto ya no será posible. Con un intervalo de un mes entre unas pruebas y otras, las oportunidades de recuperación prácticamente desaparecen y el profesor que decida que el alumno no merece el aprobado a finales de mayo, debe reflexionar sobre su veredicto, pues lo está condenando a repetir.

Por las mismas razones, los alumnos que se presentaban a la prueba extraordinaria para intentar mejorar las calificaciones de la ordinaria pues tendrán que esperar al curso que viene. Verdad es que este caso se ha ido volviendo cada vez más raro, pues, en pocos años, todas las carreras han ido completado su alumnado en la primera convocatoria.

Como hemos señalado, este desprecio hacia el alumno que busca las segundas oportunidades no es nuevo, sino que forma parte de un continuo de medidas para minusvalorar las pruebas a las que estos se presentan. Nosotros las hemos conocidos bien surtidas de alumnos y las hemos visto menguar año tras año. De esta forma nuestro Centro pasó de la quincena de escolares que se presentaban a convocatorias con uno o con dos alumnos. El puesto de profesor acompañante que hemos desempeñado (las pruebas de septiembre se realizan en la capital de la provincia) desapareció ya hace varios años.

Las universidades deseaban completar su cupo de alumnos antes del cierre estival del 31 de julio y han acabado por lograrlo. Nos queda por saber si ahora repartirán su oferta entre las dos convocatorias o se limitarán a acoger a los alumnos de la ordinaria.

No hay comentarios:

Publicar un comentario